30 de agosto día de Santa Rosa de Lima |
Memoria de un vestido que yo, Rosa de Santa María, indigna esclava de la Reina de los ángeles, Virgen y Madre de Dios, comenzó hacer con el favor y ayuda de Nuestro Señor. La túnica interior ha de ser de seiscientas avemarías y seiscientas salves y quince días de ayuno, en reverencia del gozo santísimo que recibió, cuando el ángel le trajo la embajada, que había de encarnar el Verbo eterno en sus divinas entrañas.
- La tela de que ha de ser este vestido, ha de ser de seiscientas avemarías y
seiscientas salves, y quince rosarios, y quince días de ayuno; en reverencia del
gozo santísimo que recibió, cuando fue a visitar a su prima santa Isabel.
- La guarnición y bordado de este vestido, ha de ser de seiscientas avemarías, y
seiscientas salves y quince días de ayuno; en reverencia del gozo santísimo que
recibió, cuando parió a su hijo santísimo, mi Señor Jesucristo.
- Los broches con que se ha de salpicar este vestido, serán de seiscientas
avemarías, y seiscientas salves, y quince días de ayuno; en reverencia del gozo
santísimo que sintió, cuando presentó a su benditísimo Hijo al templo.
- El collar que ha de llevar será de seiscientas avemarías, seiscientas salves, y
quince días de ayuno; en reverencia del gozo santísimo que sintió, cuando halló
a su benditísimo Hijo, disputando con los doctores en el templo.
- Un ramillete que ha de tener en sus santísimas manos, ha de ser de treinta y
tres padrenuestros y otras tantas avemarías, con sus gloria al Padre y otras
tantas salves, y otros tantos rosarios de gracias a Dios. Y otros tantos rosarios
de alabanzas a la Virgen en reverencia de la santísima edad de mi Señor
Jesucristo.
- Y este vestido está acabado. Dios sea bendito y su santísima Madre supla por
su gran piedad mis faltas y perdone mi atrevimiento.
Fuente: Primer proceso ordinario para la canonización de santa Rosa de Lima (1617-1618),publicado por el padre Hernán Jiménez, con los testimonios de los
testigos que conocieron a la santa, editado en Lima el año 2002. En: P. Angel Peña. Santa Rosa de Lima, la alegría de Dios. Lima.
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