El
pecado del hombre ha dado muerte
al
Ungido de Dios y, en cruz clavado,
con
su muerte venció todo el pecado,
con
su amor del mortal cambió la suerte.
Nueva
vida dará a todas las gentes,
saciará
su gran sed siempre sentida,
brotarán
en el alma redimida
de
la vida de Dios copiosas fuentes.
Luz
que brilla en lo alto,y reverbera
en
la honda pupila dilatada
de
la angustia del hombre, que, en su espera,
sin
saberlo tal vez, sólo quisiera
ver
su cruz en tu cruz, luz deseada,
para
guardar muy dentro lo que viera. Amén
Himno del Oficio de lectura/ Miércoles santo.