El seguimiento de Cristo. Por S.S. Pablo VI

No existe otra posibilidad, para nosotros, sino aquella de entrar en la contemplación de estos días de Pasión a través del “seguimiento de Cristo”: vivamos estos días buscando su presencia en las llagas de nuestra historia –en el trabajo, con la familia, con los amigos- ; sigámoslo por los caminos de Jerusalén, teniendo cuidado de regresar a Él  cada vez que, durante esta semana nos demos cuenta de haberlo traicionado, abandonado, perdido de vista; subamos con Él hasta el Calvario y pidámosle que,  Su abandono total en la muerte de cruz, nos permita reconocerlo como Aquel que es el único que puede cambiar nuestra vida,  así como hizo el Centurión que antes se había burlado de Él: «verdaderamente éste era  Hijo de Dios» (Mt. 27,54)

S.S. Pablo VI.  Congregación para el clero.

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