El amor de Dios está ardiendo. Por Fulton J. Sheen

A veces algunas personas piensan que el Amor Divino está muy lejos, mientras el amor de las criaturas es muy cercano y real. Con todo, esto no es verdad; es el amor de Dios el que está ardiendo, y la frágil devoción del amor de las criaturas permanece frío y amargo. Para probar lo anterior necesitamos sólo ir al santuario de nuestros corazones, examinarlo en sus intimidades de amor, y veremos cómo Dios ha satisfecho a éstas más allá de los sueños más locos y de las más ardientes esperanzas. En otras palabras, Dios revela Su amor en términos de intimidades del corazón humano.

Fuente; Fulton Sheen.  El eterno Galileo. Una vida de Cristo para el mundo moderno. En el capítulo Intimidades divinas.

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